Belleza

La belleza es un estado de ánimo,
está por doquier cuando decides mirar
o escuchar o tocar o paladear u oler.
El musgo verde-intenso en la parte norte de los árboles,
el doloroso color naranja de un pino recién cortado,
las aguas revueltas del río Duero de color chocolate
forman un todo capaz de embelesarnos.
Pero también una predicción cumplida es bella.
Y una construcción matemática.
Descubro que hay ojos que se clavan en los míos
al cruzarme con alguien en la calle.
Rostros de mandíbulas incógnitas, todo ojos,
formas de hermosura local.
La belleza es un gráfico favorable.
A veces sobrevive todo el día en unas nubes
capaces de cobrar vida en el ocaso.
Allá donde hay una grieta o una secuencia alterada,
una singularidad o una sorpresa,
allí está el punto de fuga y el concentrador,
el enorme imán que te atrapa para siempre
que hace que trasciendas tus límites humanos.




