Poema 555: Emoción: Voces radiofónicas

Emoción: voces radiofónicas

Historias que llenan de belleza la mente

y de ilusión el espíritu:

Almodóvar en el festival de Donostia,

Joni Mitchell en la voz de Use Lahoz.

Se eriza el pelo de los antebrazos,

entra en tromba el deseo de leer,

de visualizar, de tirar de hilos eruditos,

de escuchar canciones o ver películas.

Las voces radiofónicas son preciosas,

evocan rostros que no conozco,

personalidad, carácter, tolerancia,

la intensidad con que hacen su trabajo

y, –al igual que el arte–, transmiten emoción.

La cultura sobrepasa y silencia la noticia,

la desgracia que tantos adeptos tiene,

el cúmulo de desastres humanitarios

pobladores de audiencias millonarias.

Inflexiones trabajadas, mucha labor previa,

estudio infinito y profesionalidad,

la creencia pura en la divulgación seminal,

en todo lo que nos humaniza y eleva.

La sutileza tiene cabida al igual que la ironía,

costosas construcciones paso a paso,

un oasis diario repleto de sorpresas y hermosura.

Poema 486: Como cada día

Como cada día

Como cada día, leo un poema de Safo

y otro de Fosse.

Como cada día, leo la prensa, y procuro

escuchar la risa cantarina de Laura Barrachina.

Como cada día escucho el Poema de la Pasión,

y miro con intensidad y concentración

a ver si atisbo el bidón encendido.

Como cada día procuro mirar el río,

caminar por una u otra pasarela fluvial.

Como cada día ando varios kilómetros,

miro el podómetro en el móvil y sonrío.

Como cada día consulto mi dispositivo personal

unos centenares de veces o más.

Como cada día, trato de escribir alguna frase

o de hacer una fotografía bonita.

Como cada día atisbo el amanecer

en la percepción de quien me observa y se mofa.

Como cada día hago la cena con primor,

anhelo el tiempo propio de soledad.

Como cada día llego a mi cama agotado y dormido,

anoto un día más en los que me ha tocado vivir.