Vagabundeo hogareño

Das vueltas por la casa sin hacer nada,
lees un artículo, miras el móvil,
inconsecuencias y tonterías
vanas ocurrencias, una imagen
para el consumo rápido.
Observas tus lugares: libros, un mueble,
unas fotos o un cuadro,
la casita de muñecas que construiste
pacientemente en tu juventud,
todo en lo que posas la mirada
te proporciona una cierta seguridad.
Eres libre de considerar el tiempo discontinuo
por muy errado que estés.
Placer o dolor al caminar
te detienes a leer un poema
o a jugar a las cartas con el niño.
Apocalipsis, yugos, errático vagabundeo.
Tu sombra en un espejo plano
evidencia tu edad o tu disgusto
o enciende la luz en tus ojos
en ironía continua impagable.





