Personaje feminista en busca de relato 
Miasmas, escorrentías, llueve
hojitas amarillas bajo el árbol mágico,
se ha renovado el aire
y el personaje crece y busca su salida.
Rueda como una bola de nieve,
se enriquece, absorbe aquí y allá,
se nutre de cada conversación
de cada idea filtrada por la razón.
Ella tendrá su visión del mundo,
sus expectativas, sus miedos,
caminará sola sufriendo miradas
machistas humillantes.
Despreciará la cómoda insensibilidad
ignorante o la tolerancia pasiva
de sus congéneres, luchará por su libertad
social y su idea de sí misma.
Deseará y será deseada en igualdad,
leerá e investigará los motivos seculares
de su yugo religioso y comunitario,
florecerá su sexualidad sin límites.
Ella continúa definiéndose cada hora,
en paralelo decenas de relatos la rozan
o llaman con insistencia: amante, asesina,
guardiana o directora de orquesta.
Llueve, todo se renueva, el peso
de las hojas de los árboles es incalculable,
camino sin paraguas, sostenido por la imagen
de mi personaje en busca de su relato.
