Poema 561: SEMINCI

SEMINCI

Fue un oasis cultural en la dictadura

y sigue siéndolo en el presente acelerado,

un sosiego atemporal:

eruditos, habituales, cinéfilos,

un imán que apenas atrae al público local.

Escaparate, faro, hito en el calendario,

un enorme cúmulo de trabajo oculto,

y la calidad asegurada de lo diferente.

Una copia sueca restaurada del 47

nos tuvo en vilo cien minutos:

luces, sombras, primeros planos expresivos,

el tormento de la ética y el deseo

más actual que nunca.

Desfiles, alfombras, oropeles,

seis noticias nacionales y el brillo

de los flashes en la noche fría pucelana,

una minúscula isla cultural encapsulada.