Ruina

Ruinas y la estela del hombre,
la destructiva presencia ignorante,
el aprovechamiento de cada piedra,
las majadas protegidas del lobo y el zorro,
miliarios en la vía pecuaria.
Cardo y decumano, geometría simple,
un anfiteatro desprotegido de las murallas,
los muertos incinerados,
estelas o lajas señalan el enterramiento,
viento y sedimentos y ruina.
El calor reseca todo, salvo los olivos,
cargados de fruto ofrecen su sombra
al caminante viaplatense,
amargas olivas listas para ser quemadas,
el objetivo de la cámara no perdona el detalle.
Jóvenes parejas se besan
sobre el maderamen que protege las termas,
sonríen sobre las ruinas,
satisfechos de su erotismo
imaginan la sensualidad de veinte siglos.
No hay techo, ni banderas, ni rutina,
el foro aún no está excavado,
nadie habla más allá de unos tópicos de Historia,
mientras, un milano sobrevuela el conjunto
en busca de alacranes cebolleros.
